Viernes de luna llena en la venta El Gallo

Estimados lectores y amigos, el pasado viernes fue luna llena como pudimos comprobar todos los que salimos a la calle. La noche estaba despejada y no hacía calor. La noche, y las personas que nos íbamos a reunir, a partir de las diez y media en uno de los lugares más bellos del mundo, llevábamos el corazón predispuesto a la sorpresa y a la alegría. Todo esto os lo explico porque fue nuestro amigo y poeta Juan Carlos Friebe, el que nos invitó a la Venta El Gallo, en el Sacromonte, para celebrar el nacimiento del hijo de otro Juan, el dueño de la venta. Ambos Juanes tienen por costumbre citarse las lunas llenas para la poesía y la amistad. El aforo era límitado, pues se iba a realizar la velada en la terraza. La terraza es el paraíso. Sólo por ver la Alhambra iluminada, la luna entregándonos su tenue luz lechosa, las copas de los árboles surgiendo de las sombras como gigantes bailando acompasados al ritmo de la leve brisa, sólo por esto y la compañía, merece la pena vivir en Granada. Ahora quiero agradecer desde este blog a Juan, el padre, su amable cortesía y disposición para con todos los invitados, unos conocidos y otros no, como era mi caso y el de Isabel. Hospitalidad, alegría, felicidad y cierta nostalgia. He intentado subir las grabaciones que realicé de las lecturas y los cantes, acompañados de guitarra flamenca, pero la tecnología, por ahora no lo permite. Bebimos, comimos, hablamos de poesía, de proyectos, pero cuando llegó Rafael, guitarrista, con sus 29 años y una gracia y desparpajo inusuales, empezamos a disfrutar de una atmósfera que no podremos olvidar nunca. Nji qué decir lo extensa que fue la noche hasta que llegó el alba. Saludos a todos.